domingo, 23 de enero de 2011

CUENTO...

Guanarteme, era un niño que adoraba el mar
se pasaba los días soñando con sirenas, peces,
y tesoros de los fondos marinos.
Un día su padre le invito a dar un paseo en barco.
De repente descubrió a lo lejos un enorme pez, 
de aspecto  muy feo que sigue al barco, se lo comunica
a su padre pero su padre, no ve nada; cree que son 
figuraciones del niño.
Pasaron unos meses y el padre volvió a invitar al niño
y vuelve a ocurrir lo mismo con el pez, pero esta vez
el padre palidece del susto y le explica al niño.
Ahora temo por ti. Eso que haz visto es el pez mas
terrible  que existe  todos los marineros le temen.
Por motivos  que nunca nadie sabrá escoge  a sus victimas
y las sigue  toda la vida, hasta que consiguen devorarla.


Nadie jamas lo ha visto si no las propias victimas
¿y no es una leyenda? pregunta el niño,
no yo nunca lo he visto, le dice su padre pero dicen
que es espantoso.... No hay duda hijo mio el pez
mas espantoso  y terrible te ha elegido, y mientras  estés
en el mar no te dejara en paz,
Vamos a volver a tierra y nunca más te aras a la mar
por ningún motivo.
Pasan los años y el niño crece y consigue  todo lo que 
el mundo anhela. a los ojos de todos es un triunfador
pero en el fondo de su alma sigue  la herida abierta,
por no volver al mar que adora. Pasan los años
y el sigue con la añoranza del mar, un día  viejo y cansado
ya decide enfrentarse con aquel peligro, por fin
enfrentarse con aquel animal que había visto muchas veces,
cada vez que se acercaba al mar, a cierta distancia
de la costa.


Una noche cogió un arpón se monto en una pequeña
barca y se interno en el mar. Al poco tiempo asomo
el horrible pez al lado de la barca.
Aquí me tienes, ahora es cosa de los dos, dijo el hombre
mientras levantaba el arpón contra el pez, entonces
el pez empezó hablar, quejandose con voz suplicante.
Ah, que largo camino para encontrarte, también yo
estoy destrozado por la fatiga. Cuanto me haz echo nadar.
Y tu huías y huías porque nunca haz comprendido
nada. ¿A que  te refieres?
A que no te he seguido para devorarte. El único 
encargo que me dio el rey del mar fue entregarte esto,
y el gran pez saco de la lengua, tendiendo  al hombre
una esfera brillante, el la cogió entre las manos y la miro.
Era una perla de enorme tamaño. Reconoció en ella
la  famosa perla del mar, que da a quien la posee
fortuna, poder, amor y paz.
En aquel instante el hombre entendió todo.
Y entendió también que había desperdiciado su vida
sin ser feliz, y además he arruinado la tuya también
le dijo al pez, el pez le miro y le dijo.
Adiós hombre infeliz. Y se sumergió en las aguas 
para siempre............... 

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